Con el acompañamiento de Consultora Conecta, Hernán Camacho, dueño de Fabrican, pasó de llevar la administración de su empresa en cuadernos a una estructura con sistemas de gestión, control de costos y planificación financiera. 

El crecimiento de una PyME depende del oficio y de la visión del dueño, pero también del orden administrativo y financiero que sostiene cada decisión. El caso de Fabripan, una panadería con fábrica y sucursales en Santiago del Estero, muestra qué ocurre cuando una empresa familiar decide profesionalizar su gestión. 

 “Cuando uno ya tiene ese instinto que tiene que modificar algo ahí en su empresa, lo tiene que lo tiene que seguir, lo tiene que escuchar”.

Hernán Camacho, dueño de Fabripan.

De los cuadernos a los sistemas de gestión

Hernán Camacho inició su panadería con pocos recursos. El registro de operaciones se hacía en cuadernos, la organización dependía de la memoria y las decisiones se tomaban con información limitada.

Ese esfuerzo inicial permitió crecer, pero también generó un problema frecuente en las PyMEs: la estructura administrativa quedó chica frente al ritmo del negocio. Así, Hernán tomó la decisión de organizar y profesionalizar la gestión financiera de su empresa. Una decisión que lo llevó a reestructurar toda su organización y el enfoque con el que maneja sus negocios. 

Ordenar los papeles: el momento fundamental de todas las empresas

La primera etapa junto a Consultora Conecta fue ordenar la información. Conecta realizó un diagnóstico completo para entender costos, flujos y puntos críticos. A partir de ese proceso, Fabripan dejó atrás los cuadernos y adoptó planillas, sistemas de registro y reportes mensuales.

Esta transición, ordenar la contabilidad de la PyME y migrar registros a un sistema contable, permitió obtener datos confiables y realizar un seguimiento profesional.

Profesionalización financiera: el antes y el después

Con la información ordenada, la empresa avanzó hacia la planificación financiera. Se estableció un esquema de control de gestión: análisis de costos, proyecciones, revisión de resultados y reportes ejecutivos.

Hernán resume el impacto con una frase clara: “Hoy no me imagino sin haber trabajado con Consultora Conecta”.

El orden financiero mejoró la previsibilidad, facilitó la toma de decisiones y acompañó la expansión de la panadería.

Qué pueden aprender otras PyMEs para alcanzar su potencial

Hernán destaca que los dueños suelen sentir cuándo algo en la empresa debe ordenarse. La carga diaria distrae, pero la metodología de trabajo de Consultora Conecta evita desvíos y acelera los resultados.

El caso de Fabripan muestra que pasar “de panadero a empresario” es posible cuando el talento y el oficio se combinan con estructuras profesionales.

Consultora Conecta acompañó ese proceso con diagnóstico, orden administrativo, implementación de sistemas y planificación financiera mensual.

Para las PyMEs que enfrentan desafíos similares, este caso confirma que la profesionalización no es un costo: es la base de una operación sólida y una decisión que amplía oportunidades.